miércoles, 21 de mayo de 2014

Caso de burnout

Jesús es profesor de Secundaria. Tiene 40 años y lleva 15 años ejerciendo esta profesión. Últimamente siente que cada mañana le cuesta más esfuerzo levantarse y comenzar la jornada de trabajo. En el instituto tiene la sensación de que los problemas -con los alumnos, con los padres y con la organización del centro-  son cada vez más y más difíciles de resolver. A veces tiene la sensación de estar sobrepasado y de no tener suficientes recursos para desempeñar correctamente su trabajo. Incluso siente que su actitud hacia los alumnos está cambiando: ya no se muestra tan cercano como antes, es más, algunas veces incluso les culpa de su malestar y tiende a distanciarme de ellos. Jesús se pregunta porqué está empezando a sentirse “quemado” en su profesión. No sabe qué le está pasando. Antes le encantaba su trabajo y se implicaba mucho más.  Jesús desearía saber qué hacer.
Efectivamente parece que Jesús se enfrenta a una situación de estrés en su trabajo. Trataré de explicar cómo y porqué se puede llegar a estar “quemado” en el trabajo con el objetivo de que Jesús y cualquier otra persona que pueda sentirse como él analicéis y comprendáis su situación.
El proceso de estrés tiene lugar cuando las demandas del ambiente, en este caso el ambiente laboral, superan nuestros recursos para afrontarlas.  Existe un tipo concreto de estrés laboral llamado “síndrome de burnout” “síndrome del profesional quemado”. Este síndrome se describe como un estado mental persistente, negativo y relacionado con el trabajo, en individuos “normales”, caracterizado principalmente por agotamiento, acompañado de distrés, sensación de eficacia reducida, disminución de la motivación y el desarrollo de actitudes disfuncionales en el trabajo. 


No hay comentarios:

Publicar un comentario